La diatermia aplica energía de radiofrecuencia para generar calor terapéutico dentro del tejido. Aumenta el riego sanguíneo, reduce el dolor y la rigidez, y favorece la reparación del músculo, tendón y ligamentos. Mejora la extensibilidad de los tejidos blandos, disminuye el espasmo y ayuda a resolver inflamaciones subagudas o crónicas. La sensación suele ser un calor agradable y controlado por el fisioterapeuta.
Es una terapia de radiofrecuencia que genera calor desde dentro del tejido para acelerar procesos de recuperación y aliviar el dolor.
No. Debe sentirse un calor confortable. El terapeuta ajusta la intensidad para evitar molestias.
Muchas personas notan alivio y más movilidad desde la primera sesión. La respuesta exacta depende de la lesión y del tiempo de evolución.
Una sesión suele durar entre 15 y 30 minutos. El número total varía según valoración clínica y objetivos, habitualmente en un plan corto de varias sesiones.
Sí: embarazo, marcapasos u otros implantes electrónicos, trombosis activa, procesos tumorales, heridas abiertas o alteraciones severas de la sensibilidad. Se revisan siempre antes de iniciar.
